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Las carillas dentales de composite son finas láminas de resina compuesta que se aplican directamente sobre la superficie del diente. Gracias a este material, es posible modificar el color, la forma y el tamaño de los dientes, mejorando así su apariencia estética.
Se trata de un tratamiento mínimamente invasivo, ya que en la mayoría de los casos no es necesario eliminar el esmalte dental. Las carillas dentales son una opción ideal para quienes desean mejorar su sonrisa de forma rápida y sin recurrir a procedimientos prolongados.
En nuestra clínica dental en Donostia, ofrecemos dos tipos de carillas dentales de composite, según la forma en la que se aplican:
Se colocan y moldean directamente en la consulta. El dentista va aplicando capas de composite sobre el diente hasta lograr el resultado deseado. Después, se endurecen mediante una luz especial en un proceso llamado polimerización.
En este caso, las carillas se fabrican en un laboratorio a partir de una impresión del diente. Una vez listas, se colocan en una segunda cita con el paciente. Aunque requiere al menos dos visitas, este tipo de carillas ofrece un acabado más preciso y mayor durabilidad.
En nuestra clínica dental en Donostia te ofrecemos una solución estética adaptada a tus necesidades, con resultados naturales y sin procedimientos agresivos.
Las carillas dentales de composite son una opción estética muy popular gracias a sus múltiples ventajas:
1.
Pueden colocarse en una sola sesión y, en la mayoría de los casos, no es necesario tallar el diente de forma agresiva.
2.
Su coste es inferior al de las carillas de porcelana, lo que las hace más accesibles para muchos pacientes.
3.
Si se dañan, es posible repararlas añadiendo más material sin necesidad de reemplazar toda la carilla.
4.
El composite se adapta al color del diente, logrando una apariencia armónica y muy natural.
Las carillas dentales de composite están especialmente indicadas en los siguientes casos:
Manchas o decoloraciones que no pueden eliminarse con un tratamiento de blanqueamiento.
Pequeñas fracturas o desgastes en el esmalte dental.
Espacios interdentales que se desean.
Corrección de formas irregulares en uno o varios dientes.
En general, las carillas de composite son una solución rápida, estética y poco invasiva. Sin embargo, en casos más complejos o con problemas dentales severos, puede ser recomendable valorar otras alternativas más avanzadas.
Las carillas dentales de composite no requieren cuidados especiales diferentes a los de cualquier otro tratamiento dental. Es fundamental cepillarse los dientes después de cada comida, usar hilo dental diariamente y acudir a revisiones periódicas para asegurarnos de que todo esté en perfecto estado.
Una de las principales ventajas de las carillas dentales de composite es que, en caso de fracturas o pequeñas grietas, el dentista puede repararlas fácilmente añadiendo más material, sin necesidad de reemplazar toda la carilla.
Por lo general, las carillas dentales de composite tienen una duración de entre 5 y 7 años. Sin embargo, su longevidad depende de varios factores, como el cuidado dental, los hábitos de higiene, el tipo de mordida y el estilo de vida del paciente.
Con un buen mantenimiento y revisiones periódicas, es posible prolongar su duración incluso más allá de ese tiempo.
Este tratamiento estético mínimamente invasivo permite corregir imperfecciones como manchas, desgastes o pequeñas fracturas, sin necesidad de tallar el diente. Ideal si buscas un cambio visible, natural y rápido. Solicita tu cita y déjate asesorar por especialistas en estética dental.
